lunes, 7 de noviembre de 2011

LAS PRESIONES

A veces me pregunto de qué pasta están hechos los dirigentes europeos. Si, porque para ser dirigente, hace falta una pasta especial que ellos no tienen. He llegado a la conclusión, de que ocupan los cargos que ocupan, por circunstancias  ajenas a sus capacidades y voluntad propia. Son gente, sin valor. Son individuos, que manejan las empresas de marketing, para que los titiriteros que mueven sus cables,  lo hagan en el sentido que  ha ellos les interesa.

Al ser gente sin valores propios, no son capaces de enfrentarse, a sus opresores por no tener coraje para ello. ¿Qué hubiera pasado si se hubieran tenido que enfrentar en un interrogatorio a las SS? Se hubieran chivado de todo lo que conocieran,  y algunas cosas, más inventadas con tal de conservar el físico, sin pensar el daño que causaban a miles de personas que denunciaban. ¿Se hubieran sacrificado para salvar de los hornos crematorios a esos seres humanos?. NO.

No hubieran sido capaces de aguantar un interrogatorio ante la Policía política de ninguno de los gobiernos dictatoriales que hemos conocido.
Por ello, no son merecedores, de ostentar cargo alguno como dirigentes de sus  pueblos, ya sean Griegos, Portugueses, Españoles, Franceses o de cualquier otro país donde están mandando los mercados y la Banca.

De ahí la explicación, de que a los banqueros les va muy bien las presiones. Con esta practica, consiguen que los títeres hagan lo que ellos quieren, hasta el punto, que por conservar el poder,  deciden decir no, donde dijeron si, y que la “democracia” y la participación de los ciudadanos se vallan a la M.

 Así  ha sido en España, sobre la reforma de la constitución, para facilitar los recortes sociales, que se hizo de espaldas al pueblo, con alevosía, premeditación y nocturnidad, hurtando la voluntad de un pueblo con tal de seguir un poco más al frente de un gobierno que no gobierna.

Ahora los dirigentes griegos lo hacen allí, porque están convencidos, que el pueblo los desautorizaría, por que  si no dan marcha atrás ya no serán nada en la vida. Pero no se dan cuenta, que la historia les tratará como gente mediocre, que lloraron como mujer lo que no supieron defender como hombres. (Con mis respeto a las mujeres) por faltarles el coraje necesario, para enfrentarse a los opresores, diciéndoles, por ahí no pasamos, el pueblo es soberano y no quiere la esclavitud de los mercados, ni la banca.

Después de esta reflexión, la gente de la calle, se tendría que dar cuenta que somos mayoría, y si presionamos lo suficiente, como no tienen valor suficiente ni razón, tendrían que ceder o mandar a la policía como ya lo han hecho otras veces, para salvar el cargo  que desprestigian, cuando tenía que ser ese cargo el de más prestigio de todo el estado.
Antonio Montero Zarco
Sumacàrcer 3 de noviembre de 2011