Como
si de un acuerdo tácito se tratara, hace 117 los ciudadanos de este país con
su voto pusieron a prueba la capacidad
política de los nuevos dirigentes que optaban a gobernar este país.
Es
evidente, que fueron unos resultados, que estuvieron influenciados por los
medios de comunicación jugando con los sentimientos de los ciudadanos para
evitar que el cambio fuera el que se había manifestado en las calle.
Les
salió mal la jugada, y los resultados no
fueron los que habían previsto. En cualquier caso, dejaron en las urnas un
reparto de escaños, que de no ser por la intoxicación por parte de los medios
facticos de la malformación informativa ya se tendría un gobierno.
¿Porque
no se tiene? El capital está jugando una baza muy importante haciendo visible
las diferencias ideológicas que existen entre las formaciones de la llamada
izquierda. Han sacado a la arena en esa pelea, a las viejas “glorias” para
influenciar y hacer fracasar cualquier acuerdo de las fuerzas de la “izquierda”
intoxicando también con las broncas interna de los partidos.
Sin
lugar a dudas, en estos 117 días, se ha puesto de manifiesto, que más que los
números de la suma de los distintos bloques de diputados, esta la razón
ideológica, porque en definitiva es lo que está en juego. Pera alguna gente que
hacemos olor a romero por nuestra aproximación a la sierra, es difícil entender
que no se haya llegado a un acuerdo para la formación de ese gobierno, porque
lo achacamos que es la hegemonía del pensamiento único lo que está en juego he
impide que se forme.
Quieren
cargar la responsabilidad, sobre la fuerza emergente de la “izquierda” de la
convocatoria de nuevas elecciones si no se da ese acuerdo que beneficie los
intereses de las empresas del IBEX 35.
Utilizan
lo que costarían nuevas elecciones, para desgastar al partido que pudiera ser el responsable de esa
nueva convocatoria. Si no se han convocado nuevas elecciones, es porque la
maquinaria de manipulación de la orientación del voto no les da mejores resultados de los que ahora tienen.
Maldicen una y mil veces su tozudez y comportamientos con los partidos
nacionalistas.
Saben que si su actitud hubiera sido mínimamente
razonables, el joven inventados por el Ibex más el PP ya estarían gobernando.
Ese error les corroe porque, porque no pueden con los resultados de las
encuestas manipular los interese económicos y la hegemonía políticas porque así
no pueden desarrollar sus políticas de recortes.
¿Porque esa gran prueba que han puesto los ciudadanos
a los nuevos dirigentes? En primer lugar para que demuestren la capacidad de
entendimiento para llega acuerdos razonables. Acuerdos que hasta la fecha son
un fracaso y su nota es de suspenso.
Un suspenso porque nos son dueños de sus
decisiones, porque han adquirido compromisos sin tener en cuenta que los
ciudadanos no habían repartido los escaños, no son dueños porque están
condicionados, a las presiones de los viejos dirigentes de la política, que a
su vez están condicionados, por los puestos de responsabilidad que ocupan en
las empresas de las puertas giratorias. Este es un problema.
En
el futuro, será muy difícil que se repitan las mayorías que se han dado desde
la instauración de la democracia. Por
ello tendremos que acostumbrarnos a que la formación de los gobiernos sea
compartida.
La prueba que tiene que superar, es la
formación del nuevo gobierno. Está muy bien el que las intenciones fueran el no
levantarse de la mesa hasta que no se llegue a un acuerdo para la formación de
un gobierno. Los hechos demuestran lo contrario, se levantaron de la mesa, y se
han tensado las relaciones. Todo apunta a nuevas elecciones, y será una prueba
de mucha importancia, el formar gobierno ya que los resultados no serán tan
diferentes a los que se dieron el 20 D
Antonino Montero Zarco
15 de abril de 2016