LA
HORA DE LA VERDAD
El
otro día le daba una mirada a un correo de un buen amigo, que
trataba de las grandes ciudades. Descubrí que era el más ingenuo de
los mortales, por haberme atrevido a pensar que el mundo se podía
cambiar. Por ello quiero entrar en el libro de guinniss de los
récords como el más ignorante de las personas. Ello me da pie para
que dentro de mi ignorancia dar mi opinión sobre los problemas que
estamos sufriendo.
Somos
un país que se podía estar orgulloso de vivir en el. Pero nos
sobran políticos embusteros y corruptos. Nos sobran banqueros
ladrones. Nos sobran empresarios esclavistas. Nos sobran
especuladores financieros, nos sobran los que pagan por un jugador de
fútbol. 94 millones de libras esterlinas o al cambio 110 millos de
euros. Nos sobran todos aquellos que están poniendo al servicio de
la especulación sanitaria la vente de la salud de los ciudadanos.
Dicho
esto tengo que reconocer, que seamos punteros en gente de todas las
tendencias, en hacer análisis de la situación, es decir tenemos el
mejor ramillete de opinadores, para desguazar todo lo que acontece
pero mi ignorancia me hace decir que les falta la concreción.
Tenemos
una izquierda, descafeinada, con tintes nitidamente liberales en lo
económico, con una falta de renovación imprescindible si quieren
recuperar lo que fueron antaño, y tonemos otra izquierda más real,
poro sin capacidad de liderar todo el sentimientos social que existe
en es país.
También
tenemos, una amplia franja de movimientos sociales, capaces cada uno
de dar tantas alternativas que de llevase acabo sería como darle la
vuelta a un calcetín, pero incapaces de ponerse de acuerdo por que
hay tantos lideres como movimientos sociales, y cada uno quiere
barrer para su lado.
Por
ello, después del verano, tendría que llegar la hora de la verdad.
Si escudriñamos en todas las propuestas que este mundo de los
movimientos sociales junto con una parte de la izquierda real, están
haciendo, se podía llegar a un decálogo que aglutinara las
inquietudes de todos y dar la respuesta que el pueblo está
reclamando.
Tenemos
un ejemplo que se remonta al programa electoral dado a conocer el 15
de enero del año 36 del siglo pasado dando el triunfo al frete
popular. No se trata de copiar su contenido parque la situación es
otra muy diferente, aquí sería otro contenido, pero lo que si es
transportable es la voluntad de unidad que tuvieron aquellas gente y
sus organizaciones.
Claro
esta que mi ignorancia, me hace pensar que en estos momentos no
existen “lideres tan carismáticos” como los de aquella época y
eso puede ser un freno para la hora de la verdad.
El
haber tenido por mi parte la osadía de hacer este relato, es porque
como he dicho al principio, me he atrevido a pensar que el mundo se
podía cambiar, no quiero dejar de pasar la ocasión de decir que si
luchamos por ello podemos fracasar en el intento, pero si no
luchamos, seguro que el fracaso esta asegurado.
Para
ello, mi propuesta sería:
Organizar
un frente cívico con toda las fuerzas de la izquierda, teniendo en
cuenta también a los “movimientos sociales”.
Que
el gobierno saliente, se comprometiera a redactar una nueva
constitución, donde fuera cambiada la ley electoral par que un voto
tenga el mismo valor allá don se de y se decida si queremos
república o monarquía.
Que
se derogaran todas las leyes laborales que han significado recorte de
derechos y libertades de los trabajadores. Y se suprimieran las
empresas de trabajo temporal.
Que
se creara una banca publica, con miras a nacionalizar la privada. Así
como la nacionalización de las empresas estratégicas,
Que
se recuperara la educación pública y se rompiera el acuerdo con la
santa sede, con la separación de la iglesia del estado, haciendo que
este fuera realmente laico.
Que
se saliera de la moneda única que representa el euro para tener una
moneda propia para poder maniobrar según las necesidades, y romper
de esta forma las maniobras de los mercados.
Que
se revisar nuestro compromiso con la organización armada (OTAN) y re
definir el papel de nuestras fuerzas armadas.
Que
se reorganizara el papel de las instituciones, suprimiendo
diputaciones y el senado.
Que
se cambiara toda la política agraria fijando unos precios que fueran
reales a los costos de producción, sin que el labrador tenga que
estar pendiente de la subvenciones y suprimir los intermediarios.
Que
se hiciera una política de viviendas sociales para evitar que se
volviera a dar la especulación depredadora que se ha practicado y
evitar nuevas burbujas como la que hemos vivido.
Esta
es la hora de la verdad. Aquí quiero ver yo a todos los ideologos de
la izquierda si tienen el coraje de llegar a unos acuerdos y hacer
posible que las imágenes que se observan en el correo de mi amigo
pueden cambiar de aspecto haciéndolas más claras y más habitables.
Por
lo tanto, si esos dirigentes de la izquierda, en la hora de la
verdad, no son capaces de juntarse, dejar al lado algunas diferencias
par facilitar unos acuerdo que podamos desterrar del poder a la
derecha política y económica, que no se lamenten y lloren como
niños por no saber defender los intereses generales de la sociedad,
por anteponer los de sus partidos y los suyos particulares, de no
hacerlo, esto recaerá sobre sus conciencias.
Antonio
Montero Zarco
valencia
23 de agosto de2013