BAJO DE
MORAL
Hace unos
años, no muchos pero más de los que quisiera, cuando algunos
hombres que habían estado en la Guerra, me contaban sus
experiencias, y hacían su valoraciones, yo me cabreaba por no haber
estado allí en aquellos momentos, era un ingenuo que pensaba que de
haber estado la Guerra no se hubiera perdido.
Hoy aquí
y ahora, me encuentro que soy incapaz de dar solución al problema de
esos seis millones de parados, que soy incapaz de dar un respuesta a
las personas con dependencia, que no hago que se suban las pensiones
teniendo en cuenta el IPC. Que no tengo respuesta para retirar el
medicamentazo.
Que soy
incapaz de retirar de las escuelas la asignatura de religión, que
soy incapaz de de no terminar con las privatizaciones de la sanidad y
las empresa públicas. De todo esto me siento responsable, como si
fuera yo el culpable de que todo esto este sucediendo, y con la moral
por los suelos, reprochándome cuando yo pensaba que si hubiera
estado allí en la Guerra no se hubiera perdido y hoy, estando peor
y no puedo hacer nada.
Estoy
desmoralizado, pensando donde están inmersos los partidos políticos,
que no es otra cosa que hacer cábalas de por donde y con quien se
pueden hacer pactos para formar gobierno. Declaraciones como las de
José Bono, abren la puerta a un pacto de los dos grandes partidos,
ya que según él, se entiende mejor con el PP que con los de IU.
¿Será solamente él el que tenga esa posición en ese partido?
Esto me
desmoraliza, porque soy incapaz de hacer reflexionar a la izquierda
de que hay algo más importante que pensar como y con quien se
formara gobierno. Desmoralizado, porque no hacen un trabajo de
oposición, para crear las condiciones de ganar lo que se hace
necesario para formar ese gobierno, estos políticos, venden la piel
del oso antes de darle caza.
Desmoralizado,
porque no tengo los medios para llevar ante los tribunales, a los
dirigentes de la banca, por los robos y abusos cometidos que han
llevado a la ruina a este país. Desmoralizado, porque la justicia es
lo más lento que se haya podido inventar. Claro que este invento, no
fue creado para hacer justicia, sino para proteger a los poderosos,
de los desmanes que han cometido a lo largo de la historia.
Desmoralizado,
porque con dinero de todos, se pagan los salarios de los policías
que protegen a estos truhanes de la ira de algunos manifestantes,
cuando su misión tendría que ser de protegernos de quienes están
abusando de todos nosotros incluyendo a ellos mismos.
Con la
moral por los suelos, porque tenemos unas instituciones judiciales,
que salvando algunos pocos de sus miembro, los demás están más al
lado de la injusticia que de la razón. Desmoralizado, por ver como
se urde la trama para no imputar a la hija de Juan Carlos I y piden
siete años de cárcel para una pianista por molestar a su vecina.
Desmoralizado, porque 45 diputados de las cortes Valencianas, piden
el indulto para un alcalde condenado por corrupción.
Desmoralizado,
por los recortes salariales de los trabajadores, y no puedo hacer
nada para impedirlo. Desmoralizado, porque los sindicatos de clase,
no responden a esas agresiones con movilizaciones, en protesta por
estos abusos, desmoralizado, porque no he hace una huelga general
política para tirar este Gobierno, que trabaja a destajo, al
servicio de la banca y los empresarios más esclavistas que nunca
tubo este país.
Desmoralizado,
porque como decía anteriormente, los partidos políticos no hacen la
oposición que se merece para tirar del poder a este puto Gobierno,
ya que no atiende ningún tipo de razonamiento imponiendo su mayoría
absoluta para hacer que en este país aya cada día más pobres y
que los ricos sean más ricos a costa de los robos en los salarios de
los trabajadores,
Estoy
bajo de moral, por el recorte que están llevando a cabo en las
libertades de expresión, manifestación y propaganda, volviendo con
estas medidas a los años más turbios de la dictadura, a poco que se
lo propongan acabaran suprimiendo las elecciones, de hecho, con la
ley de la Reforma de Régimen Local, ya se han cargado la
participación de los ciudadanos a través de sus ayuntamientos. Bajo
de moral porque detrás de esta ley, esta la privatización de los
servicios que hoy prestan los ayuntamientos.
Bajo de
moral, porque la impotencia me hace parecer un ser que nada puede
hacer para que las cosas cambien de rumbo. Desmoralizado, porque no
entiendo como el genero humano tiene el aguante de soportar todo lo
que contra el se esta haciendo. Desmoralizado porque el PP hace todo
lo que le viene en gana porque dispone de una mayoría parlamentaria,
que nada tiene que ver con la mayoría social de la calle.
Desmoralizado,
porque 182 diputados están sometiendo a 45 millones de habitantes a
sus practicas de gobernar, al servicio del capitalismo, aunque para
ello traicionen a sus propios votantes. No se que puedo hacer, para
salir de este estado de desmoralización, que me reprocha todos los
días la conciencia por haber pensado, que de haber esta en la Guerra
no la hubieran perdido los trabajadores. Hoy están culminando lo que
la dictadura se dejo por hacer, esclavizar a la clase obrera, y
condenar a los jóvenes de esta generación ala marginalidad total,
ya que nunca tendrán la oportunidad, de desarrollar los
conocimientos que adquirieron en las escuelas, los institutos y la
universidad.
Por todo
lo dicho, me remito a esos 45 millones de ciudadanos, para que
hagamos valer nutra fuerza tirando del gobierno a estos farsantes de
la política, y evitemos que millones de compatriotas, vallan con la
frente por los suelos, buscando la moral que estos chorizos nos han
arrebatado.
Antonio
Montero Zarco
Valencia
22 de noviembre de 2013