No existe la soberanía nacional
En el preámbulo de la constitución del 78, se dice que la nación española, se establece la justicia social, la libertad y la seguridad, y en uso de su “soberanía” proclama su voluntad de garantizar una serie de derechos y otros contenidos.
En su articulo primero, en el punto 2 dice que en “la soberanía nacional radica el pueblo” en el Art. 25 se dice que Todos los españoles tienen el deber y el derecho al trabajo” y en el punto 2, dice que regulara un estatuto de los trabajadores: en el 37, dice que la ley garantiza el derecho a la negociación colectiva entre los trabajadores y los empresarios, así como la fuerza vinculante de los mismos, y en el 47 habla de una viviendo digna y adecuada y que. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las condiciones pertinentes para que se haga efectivo este derecho.
El que la nación Española es soberana, es una mentira pura y dura. El jueves 16, el Parlamento Europeo, decide dejar la entrada libre a los productos del campo marroquíes, en detrimento de los nuestros. La votación para esta normativa, es ganada, por una amplia mayoría, y entre los que votan en contra, están los 50 burócratas españoles, que cuando el responsable de la agricultura europea lo propuso en comisión, estos representares de los mercado, votaron a favor. De haberse opuesto en aquel omento, de una forma radical., el resultado no sería el que ya es ley.
Sin lugar a dudas, los más perjudicados, serán los agricultores valencianos. Existen agravios comparativos que hacen que las exigencias en los tratamientos, sanitarios sean muy rígidos para nuestros agricultores, mientras no son lo mismo de exigentes para los productores marroquíes.
Pero para saber realmente, porque ese favoritismo a los de Marruecos, Se tendrían que hacer públicos los nombres y apellidos de los empresarios españoles que han alquilado o comprado las tierras en Marruecos, utilizado estas ventajas y los bajos salarios que se pagan en ese país, para desprestigiar y perjudicar la agricultura de nuestro Estado.
Por todo ello, los gobernantes de nuestro país, no pueden decir que las decisiones se toman de forma autónoma. Las decisiones las marca Brúcelas y la Merkel, antes las ejecutaba el Presidente Zapatero y hoy el Presidente Rajoy.
Esto hace que los que los ánimos, de las gentes del campo sean totalmente desmoralizantes, ya que los políticos, no escuchan el sentir y las lamentaciones por los bajos precios que los especuladores están pagando, que unido a las heladas y la inhibición de los poderes públicos, crean las condiciones par deslegitimar a los gobiernos ya que son los que están creando las condiciones para el abandono de las tierras dejando, nunca mejor dicho, el campo libres para que los grandes comercios especulen a sus anchas.
Si añadimos las exigencias, de la reforma laboral, el despido libre y los bajos salarios que quieren imponer desde esa Europa de los bancos, y aplaudido por la patronal más retrograda de este Estado, por mucho que Rajoy diga que es por el bien común y para crear empleo, queda demostrado que los derechos y la “soberanía popular” que marca de la carta magna es como agua de borrajas que no vale para nada, ya que las decisiones se toman fuera de nuestras frotaras.
Antonio Montero Zarco
Sumacàrcer Valencia 18 de febrero de 2012