Desde mi opinión anterior
denunciaba los sujetos que forman los grupos de los culpables de la situación que vivimos. Sin
lugar a dudas los gobiernos son los principales culpables. ¿Pero acaso los
resabiados no tienen motivos para mantener esa posición? Todos los opinadores
están cansados de repetir una y mil veces algunas de causas por las cuales la
gente reacciona de esa forma. Ha veces no sé hasta qué punto conviene
recordarlas, mentiras, engaños, incumplimientos, corrupción y prepotencia son
las hojas de presentación de cierta gentuza.
En lo que concierne, al PP,
sus engaños no causan los efectos que en una sociedad avanzada se tendrían que
dar. En el seno de este partido, las revueltas internas se solucionan con el
reparto de la tarta. Tarta que corresponde a lo público. Es decir, los estudiosos
¿Qué hostias hacen que no dan a conocer los enchufados por este partido político
en empresas e instituciones públicas? Ya hemos visto, en todos los casos de
corrupción en los que está implicado el PP y que en una democracia adulta
estarían fuera de la ley. Este comportamiento que debería ser un revulsivo para
la agitación callejera, da la sensación que sea como un bálsamo de fierabrás
que todo lo cura debido en parte al enchufismo.
Todo esto no justifica el
comportamiento de una parte de la sociedad. ¿Qué se hace desde la izquierda
para vencer estas adversidades? Nada o muy poco. La imagen que dan, no les
libra de los males que agobian a la sociedad. Su comportamiento no sirve de
ejemplo para motivar a los desencantados para que puedan abandonar su cota de irresponsabilidad.
La imagen del PSOE es denigrante. Sin lugar a
dudas, su comportamiento es debido a las cuotas de poder para asegurarse el
sustento, o el acceso a las empresas de las puertas giratorias, que no son como
las de los hoteles donde te introducen los porteros que te recogen el equipaje.
Estos comportamientos están alejando del partido a muchos militantes y a muchos
más de sus votantes, he aquí pues otro detonante de culpabilidad de las
calamidades que padece los ciudadanos.
Izquierda Unida, con el ciclón
desencadenado por el surgimiento de Podemos, ha quedado prácticamente
eclipsada, su apuesta por la coalición de Unidos Podemos (UP) acertada en su
forma pero posiblemente no en el fondo, ¿No fue motivo de una parte importante
de la perdida de ese 1,2 millón de votos? Algo tendría que ver. El negar lo
importante de la aparición de Podemos seria de necios. El cambio en la vida
política de este país es uno de los acontecimientos más importante desde la
instauración de la democracia “tutelada”. ¿Pero todo este cambio ha sido positivo?
No voy a traer todas las “picias” que durante
su existencia han cometido y están cometiendo. Dicen que debe ser así las
nuevas formas de militancia y hacer política. La prensa del sistema, no se
cansa en azuzar la llama de etas nuevas formas de hacer política para que se
agudicen las contradicciones internas, donde los poderes facticos puedan sacar
tajada de sus desavenencias. Todo gira alrededor de, Twitte, Whatsapp, Telegram
y Facebook, la militancia, la participación y los debates. Esto es lo que se
lleva ahora, lo de antes es rancio, arcaico y sin sentido.
Esto de las nuevas forma ya
lo puede decir el sursuncorda, lo pueden defender todos los dirigentes ávidos y
por haber, pero yo no comulgo con ruedas de molino, ni con hostias consagradas.
No niego ciertas ventajas de estos medios, pero se tienen que saber utilizar,
el exceso es negativo hasta para hacer “comilonas y el amor” aunque si esto
último lo practicaran más los políticos el mundo se vería y sería de otra forma. Por lo tanto, estas formas de
militancia, de lavar los trapos, animados por los medios de la derecha, no es
casual, les interesa estas confrontaciones para que aumente, ese número de
“irresponsables” que no votan, porque ellos saben que los suyos en este terreno
son minoría.
Dicho lo cual, solo queda
hacer un llamamiento a la reflexión por parte de la izquierda. Su fuerza está
en la unidad de acción, los elementos externos e internos que se empeñan en
crear las divisiones, lo hacen porque tienen miedo a que la izquierda pueda
tener los protagonismos que conforma la mayoría de la sociedad, y se les termine
el chollo del reparto de la tarta. De no hacer ese esfuerzo todos serán
culpables de los males que nos aquejan.
Antonio
Montero zarco
18 de
enero de 2017