domingo, 5 de febrero de 2017

¿SE ESTA COCIENDO EL FIN DEL IMPERIO?


 Populismo, esta palabra tiene mas definiciones de las que le adjudican los medios y la propaganda del sistema. Por ello las comparaciones son repugnantes y odiosas.
¿Es populismo pedir al gobierno que no corte la luz a quienes no la pueden pagar? ¿Es populismo decir que a los pensionistas les están robando la pensión? ¿Es populismo que la justicia es una farsa y se le pudran los casos de corrupción que afectan a piliticos? ¿Tiene esto algo que  ver con cerrar fronteras, para personas de  confesiones musulmanas, y vecinos territoriales y derogar la reforma sanitaria que a atendía a los más necesitados?
Este hombre llamado Donal Trump no ha engañado a nadie, está cumpliendo lo que prometió a sus votantes, no nos quejemos pues de su populismo, es consecuente con sus promesas. Otros que nada tienen que ver con el “populismo” nunca cumplieron con sus compromisos he hicieron todo lo contrario de lo que habían prometido.
Pero el meollo de la cuestión, es donde parara la ejecución de las promesas de Trump.  ¿Le permitirán los lobbis financieros que las lleve a cabo? ¿Hemos pensado las repercusiones que puede desencadenar las protestas en los EEUU protagonizadas por sus ciudadanos?
Los componentes del club Bilderberg sabían del populismo de Trump y no hicieron nada para frenarlo, al contrario arremetieron contra Bernie Senders, porque podía ser más incómodo que Hirali Clinton, no podían permitir que Senders crítico con el sistema de financiamiento de las campañas electorales y de las grandes corporaciones, su crítica al “capitalismo” salvaje y a favor de un sistema de salud público,  una educación universal y gratuita logrando con estas propuestas el apoyo de los jóvenes estadounidenses, ¿No se podía llamar también ha esto populismo?
Yo considero que una parte importante de los decretos que está firmando el magnate de los negocios convertido en prescindente, no están favoreciendo los negocios de los carroñeros de las fianzas.
Primero fueron las mujeres el mismo día del juramento del cargo como presidente las que le dijeron no te queremos por sus manifestaciones discriminatorias para la mujer. Hoy son muchas las ciudades que su gente se está movilizando  al grito de no eres nuestro presidente. Este movimiento se está desarrollando en las grandes ciudades de los EEUU al grito “Our Revolution” (nuestra revolución) ya hay quienes están comparado estos movimientos con el Podemos de nuestro país y el 15M de los estados unidos. Dicho lo cual, tendremos que preguntarnos cuál es el papel de los gobiernos europeos y los partidos de la oposición.
En  primer lugar se tendría que analizar el por qué estos fenómenos se están desarrollando en todo el mundo. Si los gobiernos europeos se miran al espejo, se verán como los mentirosos que han engañado a sus militantes y a sus votantes son unos falsos, entonces que nadie se rasgue las vestiduras  cuando los partidos xenófobos están consiguiendo cuotas de poder que nunca antes desde que Hitler lego al poder habían tenido.
Hoy ante la posición que mantiene Trump, el comportamiento de los gobiernos europeos es de cobardes, son incapaces de dar una respuesta unánime note la barbarie que representa el magnate americano. Y son cobardes porque este mundo que nos toca vivir, o cambiamos los hábitos del comportamiento o seremos víctimas de los egoísmos que dirigen el mundo.
 Porque no habrá muros lo suficientemente altos para frenar las ganas de libertad y de calmar el hambre como para frenar esas necesidades que tienen los pueblos que hoy se encuentran en la miseria por el saqueo de los países colonialistas de tiempos pasados. Cobardes porque no son capaces de frenar la expansión de los judíos sobre las tierras ocupadas en la guerra de los seis días, siendo esta una cuestión que tiene mucho que ver con los acontecimientos de todo el mundo árabe, y los terrorismos inventados por el imperialismo.
Ante esta realidad los partidos llamados de izquierdas, que también traicionan a sus votantes y afiliados, están inmersos en buscar su supervivencia, no ya como partidos sino más bien la supervivencia personal porque se ha hecho del arte de la política su forma de vida. Cuando esto pasa, cuando no se está sintiendo el dolor de la calle, cuando no se sufre la losa del despido sin compensación, cuando no se tiene que repartir las pensiones con los descendientes par que puedan ir pasando. Cuando sabiendo que más de 8 millones de  trabajadores son pobre por la miseria de su salario. Cuando todo esto ocurre y no se sale a llenar las calles se están dando pasos para el auge de los “populismos” fascistoides tome auge y puedan terminar con la democracia controlada que en Europa se vive desde que terminara la II guerra mundial.
Por ello quiero hacer un llamamiento al sentido común a la unidad de acción de los partidos de la izquierda, a los sindicatos de clase para dar una repuesta en las calles a las políticas de recortes sociales, contra la corrupción y un no rotundo a las decisiones que desde los EE.UU, está tomando su nuevo presidente que pude dar al traste con las formas de vida de los pueblos del mundo.
Antonio montero zarco

5 de febrero de 2017

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